Mi nuevo teclado mecánico.
Como muchos me lo pedisteis os prometí hacer una breve reseña de lo que me está pareciendo el teclado mecánico que me he comprado hace no más de dos semanas. Continuar leyendo «Reseña del teclado mecánico»
Como muchos me lo pedisteis os prometí hacer una breve reseña de lo que me está pareciendo el teclado mecánico que me he comprado hace no más de dos semanas. Continuar leyendo «Reseña del teclado mecánico»
Como muchos de ustedes saben, soy aficionado a correr. Lo practico, al menos, tres veces por semana.
Continuar leyendo «La carrera urbana de Vélez-Málaga y carrera de la esperanza.»
Poco se habrán parado a leer la dedicatoria de Aleóntrica, pero yo sí que le dediqué su merecido tiempo en elegir las palabras correctas para ello.
Hoy, en este día tan señalado, quiero darles las gracias a mis estrellas que, seguramente, están orgullosas de mí, allá por el infinito.
No te acerques a Withechapel.
En las sórdidas noches británicas el mal acecha envestida en forma humana. No camines solo. Las noches no están para ello. No te fíes de nadie y menos en Whitechapel.
Las fauces del mal entrarán en tu dormitorio y te hará sentir cosas que pocos consiguen.
Jack Brooks, aquel sádico, llegará a ser una persona normal olvidándote del mal que desprende. Lograrás empatizar con él en algunos aspectos.
Disfrutarás con él si te gusta el terror. Si te gusta la magia.
El Callejón de Jack es una de esas obras que merece la pena leer. Sin más preámbulos.
Hoy, aunque voy con retraso, no me quiero extender demasiado. Voy a tratar el tema desde mi punto de vista y desde mi propia experiencia.
Lo que quiero matizar es que para que sea considerado piratería debe haber detrás de una copia ilegal, alguien que se lucre. No es mi caso. Ni de la página que he usado para descargar las copias: no tenían anuncios.
Lo reconozco, me he descargado copias ilegales de libros. Sí, no lo voy a negar. Pero tampoco voy a negar que los autores que he “pirateado” han ganado dinero.
Lo cierto es que cada vez que me he descargado un libro de un autor reconocido y el libro me ha gustado, he ido comprando más libros, físicos sobre todo.
Cuando me decidí a comprar el lector de e-books de Amazon, lo hice principalmente para leerme aquellos libros que veía en las estanterías de las librerías o centros comerciales, pero comprándolos a un precio más asequible. Ingenuo de mí.
Gracias a esta adquisición he descubierto algo que, aunque ya sabía, no lo había experimentado por mí mismo. Se trata de los autores independientes. Ahora, me confieso enganchado a ellos. Deseoso de leer obras que se desvíen del resto, de lo mercantilmente impuesto por las editoriales.
Hoy voy a comentar la primera obra independiente que he leído. Si no lo recuerdo mal, creo que también es la primera obra que publicó el autor en esta plataforma.
La entrada de hoy en el blog tratará sobre la sinopsis, qué es, cómo debemos entenderla y crearla.
Para comenzar voy a mostrar —sí, es un copia-pega— lo que nos dice nuestro querido diccionario de la Real Academia Española sobre esta palabra:
Del lat. tardío synopsis, y este del gr. σύνοψις sýnopsis, de συν- syn- ‘con-‘ y ὄψις ópsis‘vista’.
f. Disposición gráfica que muestra o representa cosas relacionadas entre sí, facilitando su visión conjunta.
f. Exposición general de una materia o asunto, presentados en sus líneas esenciales.
f. Sumario o resumen.
Quizá sea uno de los pocos lectores que han descubierto tarde la maravilla que significa el Kindle para la sociedad.
Como lector he descubierto un mundo de libros al alcance de un clic. Así. Sin más. A golpe de ratón dejamos la tarjeta seca. Es increíble el mundo editorial. El gran volumen de dinero que manejan vendiendo libros a quince o veinte euros para que el autor solo gane dos. Sin embargo, el revolucionario mundo de Amazon, hace que, con un desembolso por parte del lector de tan solo tres euros, el autor gane esos dos que tanto costaba conseguir antes.
No solo eso. La cercanía con la que los autores noveles —o no tan noveles— se acercan a ti es digna de nombrar. Te demuestran que son personas más allá de los libros o contratos. Son personas y les gusta serlo. Y ese es el camino correcto.
Como dijo Erauz: «el roce crea el afecto y el afecto cercanía» y esa cercanía se convierte en ventas. Y no son ventas por el puro hecho de decir «como yo te conozco y somos amigos, me compro tu libro y hago la pose». No, no se trata de eso. Todo el mundo nos movemos por gustos y sentimientos. Y el gusto es lo que te va a guiar a la hora de hacerte con uno u otro libro y a seguir a determinado autor.
Como autor, he conocido a gente magnífica y espero seguir haciéndolo. Gente que cree en tus proyectos y gente que te ayuda. He conocido a otros autores que lejos de tirarte una piedra, te dan la mano. Existe un «colegueo» entre determinados grupos de autores, en la mayoría diría yo. Aunque, por desgracia, el ser humano es como es y siempre nos podemos encontrar a alguien buscando broncas.
En general, el mundo Kindle, y es lo que me interesa, está abriendo las puertas de la literatura a muchas personas que antes las tenían cerradas. El bajo precio y la gran calidad de muchas de sus obras hará que nuestro mundo siga creciendo y, espero, que por muchos años más y que todos los que estáis leyendo esto lo vivamos y que el fenómeno nos sobreviva.
Porque la literatura debe ser alcanzable para todo tipo de público. Gracias Amazon.
Ser escritor también es una profesión. Digna y equilibrada. Pero nadie reconoce la labor de un escritor cuando es novel o cuando no gana los euros suficientes para vivir de ello. Incluso hay quien no ve una profesión en los escritores que solo publican en digital.
Esta gente, por lo general, no saben de la dedicación que un escritor. No conoce el inmenso trabajo que hay detrás de una sola hoja, de un párrafo, de una frase. Todo tiene que cuadrar y ser medido con exactitud y hay quien lo hace mejor y peor.
Es curioso que haya personas que te digan que una obra no vende porque es mala o no se entiende y que las obras verdaderamente buenas se venden a palés. Falso. Más allá de la pura verdad, una obra no es más buena porque sea más vendida. Una historia que se vende es una historia que atrapa y que engancha, pero no por ello es una historia bien escrita y redactada (ojo, no le resto valor, también lleva su trabajo y es de apreciar). Hay historias mejores escritas que se venden menos y son buenas obras. En muchas ocasiones, eso pasa y ha pasado siempre.
A lo largo de mi vida he leído una gran cantidad de libros: modernos y clásicos. He leído artículos y los he realizado. Una buena obra debe estar escrita con la suficiente corrección y elección adecuada de palabras. En ciertas ocasiones, la trama da lo mismo porque la narración te absorbe. En otras ocasiones, hay muchas buenas obras que no consiguen la atención del lector y no por ello deja de ser una obra maestra.
Ser escritor novel es un trabajo. Y lo hacemos con mucho gusto. Ya publiquemos o no. Se vendan o no se vendan. Es lo que nos gusta y seguiremos haciéndolo insaciablemente.
No hay que ser pesetero, pero si es cierto que si nos cae algún eurillo no nos vendría mal, pero no lo hacemos solo por ello. Una crítica de un lector, un mail, una reseña en un blog, un me gusta en Facebook… esas cosas tienen un grandísimo valor para un escritor novel, ya que lo que principalmente busca, es la aceptación de su obra por parte del lector.
Tras varios meses de proceso creativo ya está terminado el manuscrito de la primera parte de la trilogía de Aleóntrica.
Han sido unos meses que me han costado tiempo, encierro y disgustos; pero cuando algo te gusta es inevitable hacerlo con una sonrisa en la cara. Hoy, por fin, puedo comenzar uno de los trabajos que más me motivan a la hora de escribir y es que, como amante de las letras, y parte fundamental de mi vida, adoro leer. Y eso es lo que toca. Leer y releer una y otra vez el texto para volver a escribirlo y reescribirlo. Con suerte, quedará un texto apetecible.
Es cierto que es una historia muy sencilla de leer y de las que te apetece devorar. Por lo menos así me sentía yo mientras la escribía y la repasaba en mi cabeza.
Durante el proceso de creación el cerebro no ha dejado de trabajar: diseñando personajes, giros, escenas… ha sido un tiempo agotador, pero feliz.
Sin desvelar mucho de la trama puedo decir que es una historia perteneciente al género negro no apta para menores y sensibles.
Por otro lado, la portada está hecha por un artistazo como es Ittai Manero, pero todavía no puedo desvelaros más.
Próximamente más y mejor.
David Árper